Diamantes naturales vs diamantes creados en laboratorio

Los diamantes naturales se forman cuando el carbono se somete a altas presiones y temperatura en la profundidad de la tierra durante billones de años. Es entonces cuando se extraen de las minas los diamantes para luego cortarlos y pulirlos.

Desde hace algunos años han ganado popularidad los diamantes creados en laboratorio, con sus siglas en inglés LGD, Lab Grown Diamonds. Estos tienen la misma composición química de un diamante natural, excepto que los naturales tienen también nitrógeno. La diferencia fundamental es que al diamante natural le ha tomado billones de años formarse, mientras que los diamantes fabricados en laboratorio están listos para ser cortados en pocas semanas y su producción es ilimitada.

Ambos tienen las mismas características físicas y las mismas propiedades como son la dureza, resistencia, brillo, refracción de luz e incluso durabilidad. A simple vista no es posible diferenciar un diamante natural de uno de laboratorio, únicamente un gemólogo experto con los equipos especializados podrá diferenciarlos.

GIA toman en cuenta los parámetros de las 4C’s para certificar los dos tipos de diamantes. En el caso de los diamantes creados en laboratorio, el certificado tendrá el color especificado con la letras del color correspondiente, sino que solo hará referencia al nivel en el que se encuentra en la escala de color, es decir Colorless, Near Colorless, Faint, Very Light and Light. En cuanto a la claridad, tampoco se especifica en detalle, como se hace en los diamantes naturales, sino que lo califican con la categoría  Flawless, Internally Flawless, Very Very Slightly Included, Very Slightly Included, Slightly Included and Included. Además, en el certificado de un diamante creado en laboratorio constará que su origen es el laboratorio y el tipo de proceso usado para su creación.

En cuento al precio, los diamantes de laboratorio son mucho más económicos, y la tendencia en la actualidad es a que continue bajando y vaya perdiendo valor. A diferencia de esto, en los diamantes naturales, el precio es constante y siempre con tendencia a subir, ya que son recursos naturales y su oferta tiene un límite.

Tomando en cuenta lo antes expuesto, si es que usted busca comprar una joya con diamantes, y quiere conservar el valor de la misma, elija diamantes naturales, ya que esto garantiza su inversión a largo plazo. Por el contrario, si considera comprar diamantes creados en laboratorio debe tener en cuenta que usted perderá el valor del mismo en el tiempo y si en algún momento quiere venderlos, no se sorprenda si es que recibe una fracción mínima de lo que usted pagó por ellos.

En Diamonds by Jeritsa, únicamente ofrecemos diamantes naturales en todas nuestras joyas, tanto certificados por GIA como sin certificar. Permítanos asesorarle en su compra.